miércoles, 22 de agosto de 2018

EJEMPLO DE UNA LECTURA DE CARÁCTER & ÁRBOL GENEALÓGICO & ALMA & ESPÍRITU por Ismael Sánchez


Hombre de 27 años. CASO PRÁCTICO 5. 

Abriremos un Tarot desde la actitud Gestalt y el método de las Constelaciones Familiares, es decir, bajo un prisma caracterológico, genealógico, terapéutico y evolutivo, con la finalidad de tomar conciencia para comprender, desarrollar una actitud adulta para crecer y pasar a la acción para sanar.

Los meta-objetivos en los que nos enfocaremos a lo largo y ancho de la lectura son los siguientes: 

• LECTURA DEL CARÁCTER. Poner voz a las neurosis para liberarnos del sufrimiento humano y cotidiano y voz a los talentos para expresar todo nuestro potencial individual y genuino.
• LECTURA DEL ÁRBOL GENEALÓGICO. Poner voz a los ancestros para liberarnos de repetir el pasado y tomar la abundancia y la fuerza que necesitamos para ir hacia la buena vida. 
• LECTURA DEL ALMA. Poner voz a los movimientos de nuestra alma, para resolver los asuntos pendientes, ponernos en paz con nuestro destino y colaborar con el servicio colectivo que nos pide una y otra vez. 
• LECTURA DEL ESPÍRITU. Poner voz a lo que negamos para entrar en un sí a todo y a todos (incluido yo) y voz a nuestro don y misión, para acercarnos momento a momento a nuestra realización.

Desde esta metodología integral, caracterológica, genealógica, terapéutica y evolutiva de los arcanos, voy a trabajar contigo con el propósito de ser útil para ti.

Además, a parte de la visión que aporta el Tarot de Marsella, también añadiré otros mensajes del conocimiento tolteca Los 4 Acuerdos y del Oráculo de los Ángeles, así como de las esencias de Bach que puedan apoyarte en tu proceso de sanación actual, todo ello con la intención de enriquecer, ampliar y profundizar en la información y comprensión de tu lectura. 

También verás que dentro de la lectura de cada arcano hay frases sanadoras y debajo de estas, te propongo ejercicios de sanación (empleando la visualización, el símbolo y la metáfora, que son el lenguaje del inconsciente) para la integración (y dilatación) de la toma de conciencia. Desde mi experiencia, he observado, que si el "darse cuenta" no va acompañado de una actitud adulta-constructiva y de una acción creativa-sanadora, no llegamos a la verdadera solución, es decir no hay una completa integración. Llevar a cabo un ejercicio sanador es como lanzar una canica al océano, no sabemos cuándo esta tocará el fondo del mar, ni  qué efecto tendrá a corto, medio o largo plazo, pero lo importante aquí es lanzar la canica, lo importante aquí es empezar a sanar!! Los ejercicios sanadores es imprescindible llevarlos a cabo con plena intención y plena atención (presencia). 

Antes de entrar en la observación y meditación con los arcanos, es imprescindible para mí recordarte la ética del Tarot que como comprobarás tendré presente a lo largo de toda la interpretación:

• Según lo que yo puedo ver. Acepto que no puedo verlo todo y que dos miradas ven más que una. 
• Hasta cierto punto. Sostengo que la información que te comunique o te transmita resuene más o menos en ti. 
• A riesgo de equivocarme. Asumo que soy humano y que trabajo partiendo de un margen de error.

LECTURA DE TAROT CARACTEROLÓGICO & GENEALÓGICO & TERAPÉUTICO & EVOLUTIVO por Ismael Sánchez:


Lectura del carácter (reclamo infantil, neurosis, talentos y tipo de empresa). Arcano As De Copas. Según lo que yo puedo ver, en este momento te pides de forma prioritaria (seas más o menos consciente) atender tus emociones, respirarlas, sostenerlas y quedarte con lo que sientes, en lugar de evadirte, distraerte o desconectarte de lo que sientes. Ahora es momento de sentir, antes que pensar, actuar o materializar. Es importante que aquello que digas, hagas o concretes tenga un sentido para tu corazón. Por lo tanto, una de tus tareas es aprender a discernir lo que sientes de lo que sienten los demás (sobre todo de aquellos seres queridos de los cuales inconscientemente puedes adoptar sus emociones y hacerlas tuyas, sintiéndote por momentos confuso o dubitativo). Aquí la pregunta es: ¿Qué siento? ¿Y qué es mío y qué es del otro? Un corazón saludable es un corazón desde el cual me acepto con todo lo que soy, con todo lo que traigo y con todo mi destino tal y como es. Un corazón saludable es un corazón desde el cual asiento al otro con todo lo que es, con todo lo que trae y con todo su destino tal y como es. El As De Copas, te sitúa en la generación de tus abuelos y abuelas (e incluso tías abuelas y tíos abuelos). De esta generación de nuestro árbol genealógico, como descendientes adoptamos (cargamos por ellos) aquellos sentimientos y emociones (generalmente dolor) que estos no supieron gestionar, asumir, aceptar o abrazar. Por lo tanto, parte de tu corazón está al lado de esta generación y resonando con sus heridas emocionales. Aquí tu tarea como descendiente es respetar el dolor que ellos sintieron y honrar su destino tal y como fue, para quedar libre de llevar en tu corazón su pesar. Aquí la frase sanadora es la siguiente: "Queridos abuelos y abuelas. Respeto vuestros destinos, y lo que hicisteis de ellos. Para mí siempre seréis los perfectos y en vuestro honor yo tratare de sacar el máximo provecho del mío". Cualquier criatura (independientemente de la familia en la que haya nacido y crecido, de su etnia, origen territorial, cultura, sociedad o religión) tiene 4 reclamos universales hacia sus padres y linajes. Estos pedidos infantiles son profundamente inconscientes y más tarde los volcamos ciegamente en nuestras relaciones, pareja, sociedad y mundo, pidiendo a los demás (y esperando) que nos satisfagan, con el sufrimiento que eso conlleva. Le voy a poner voz a tu reclamo infantil para que puedas hacerte cargo de él desde tu yo adulto-actual. Tu pedido está en tu corazón infantil (en el niño que tiene aproximadamente 6 años). Le pides a tus papas: "Por favor, mamá, papá, aceptarme tal como soy, quererme y amarme". Aquí la frase sanadora de tu yo-adulto hacia tu niño interior es la siguiente: "Te veo. Yo te cuido. Te guío y te amo. Conmigo estás a salvo". En base a un pedido infantil no satisfecho, saciado o resuelto, construimos más tarde la neurosis (discurso o dialogo interior) de nuestro carácter. Te presentas con el carácter emocional (eso no significa que no tengamos una parte mental, visceral y corporal, ya que somos un compendio de todo, sin embargo en este momento por tus circunstancias y evolución actual, resalta el emocional por encima del resto). La neurosis nuclear del carácter emocional, es la neurosis del merecer. En la neurosis nos situamos en extremos, en polaridades, y necesitamos buscar el punto medio, volver al equilibrio. Es decir, o bien te cuentas "merezco de menos" o bien te cuentas "merezco de más", o bien te cuentas las dos cosas. Y tanto un discurso como el otro tiene un efecto y unas consecuencias en tu día a día. Con el carácter convivimos toda la vida y nos conviene conocerlo y aprender a dirigirlo (y ser cada día un poco menos neuróticos) en lugar de que este nos dirija a nosotros (y ser cada día un poco más neuróticos). Podemos contarnos merezco de más en las relaciones y contarnos merezco de menos en los trabajos, por ejemplo. Si me cuento merezco de menos, voy a mendigar el afecto, no me voy a sentir bien con aquello que me es obsequiado por la vida o por los demás, voy a sentir que no soy suficientemente bueno y digno. Si me cuento merezco de más, voy a exigir el afecto, nunca tendré suficiente, siempre voy a querer más, me mostraré descontento o inconforme con lo que recibo. Tanto si te cuentas una cosa como la otra, el resultado es el mismo, una dificultad en tomar. Tomar lo que llega de la vida y de los demás, tal como llega. El buen tomar empieza con los padres. ¿Cómo se calma la neurosis del carácter emocional? Con la siguiente frase sanadora: "Merezco lo suficiente y merezco igual que tú". ¿Cómo se logra integrar esta frase sanadora? Primero mirando a los padres y sintiendo en el corazón otra frase sanadora: "Papas. Sois los perfectos para mí. Lo hicisteis bien. Hicisteis lo suficiente". Entonces y solo entonces, podré decirme a mí mismo: "Merezco lo suficiente y merezco igual que tú". Igual que todos, ya que todos tenemos el potencial de amar y ser amados. Los talentos del carácter emocional (tener talentos no significa que los esté usando, debo desarrollarlos, ponerlos a trabajar, afinarlos) son los siguientes: Tienes capacidad de ser un apoyo emocional para los demás, acompañar a otras personas en sus procesos de crecimiento emocional, sostener emocionalmente, actitud de ayuda y servicio, generosidad, receptividad, sensibilidad y capacidad para acoger (sin necesidad de ser una casa de acogida y renunciando a ser un santo).  Por otro lado, la empresa, sector profesional o proyecto donde tu carácter emocional se siente aprovechado, útil y libre para desarrollarse (si cogemos a un carácter intelectual y lo ponemos a trabajar de monitor en un gimnasio probablemente se sentirá frustrado. Uno tiene que ir a favor de lo que es, y no en contra de lo que es) es en la empresa de la espiritualidad. Es decir, cualquier empresa o proyecto que tenga la finalidad de mejorar la calidad de vida espiritual de la sociedad. Hay empresas que están al servicio del dinero y otras al servicio de la vida. Las empresas que solo buscan lucrarse terminan fracasando o enfermando a la sociedad. Las empresas que están al servicio del colectivo y dan algo que ayude a mejorar la calidad de vida de los demás, prosperan, crecen y aportan salud a la sociedad. Que uno elija un tipo u otro de empresa también dependerá de su propio nivel de conciencia individual. Te sitúas en el eje de la madre y del linaje femenino, te estás pidiendo abundancia emocional (es decir, crear relaciones y vínculos sanos, constructivos, correspondidos y adultos en lugar de vínculos tóxicos, dependientes o infantiles). 

Ejercicio sanador 1. Soltar y devolver con amor el dolor generacional adoptado de los abuelos/as. Te acercas al campo, bosque o prado más cercano. Eliges 4 rocas, una por cada abuelo/a. Te las llevas a casa, las limpias, las dejas secar. Y después con un rotulador permanente escribes en cada piedra el nombre del ancestro y debajo la frase: "Tu dolor". Luego las coloreas con pintura, quedando lo escrito anteriormente oculto, y las piedras bien bonitas, también las dejas secar. Después eliges un día para hacer un excursión a la montaña. Llevarás dentro de la bolsa, las 4 rocas, y 4 fotos de tus abuelos/as (pueden ser copias en lugar de fotos originales), una pala (para cavar un agujero en la tierra), un puñado de caramelos o dulces, una plantita, y un poco de miel o de sirope suficientemente líquido. Te vas con todo, cargando en tu espalda con las rocas. Cuando llegues a la cima, a tu destino, descargas. Haces un agujero suficientemente profundo en el suelo, donde pondrás las piedras, junto con las fotos de tus abuelos/as, y el puñado de caramelos. Antes de taparlo con tierra, miras hacia las fotos de tus abuelos/as y sus cargas y dices la siguiente frase sanadora: "Por fidelidad a vosotros, adopté vuestro dolor y ahora con amor lo dejaré de hacer. Sois los grandes y lo lleváis bien. Yo soy el pequeño, y quedo libre". Luego tapas con tierra, plantas encima la plantita, y alrededor de la planta haces un circulo con miel o sirope a modo cierre y te vas del lugar sin mirar atrás. 

Ejercicio sanador 2. Atender desde el yo adulto el reclamo del corazón del niño interior. Te compras el peluche más bonito que encuentres en una juguetería. En un papel tipo papiro escribes: "Mi niño interior". Abres el peluche, introduces dentro este papelito y lo coses. Luego buscas una foto de cuando eras niño, de cuando tenias aproximadamente 6 años. La enganchas en la cabeza del peluche. Y en tu casa, montaras un altar (mesita), donde colocarás el peluche con la foto, y lo nutrirás. Le pondrás cada día alimentos (fruta, leche, algún dulce), y luego te lo comerás. También le dirás las siguientes palabras sanadoras: "Te veo. Te amo. Yo te cuido emocionalmente y me hago cargo de ti. Conmigo estás a salvo. No estás solo. Yo te llevo de la mano. Yo te guío". Este ejercicio lo haces cada día hasta que sientas que tu niño interior está saciado. Después llevarás este peluche a un parque infantil y ahí lo dejarás (te marcharás del lugar sin mirar atrás). El mayor presente que podemos dejar en el mundo es un niño saciado de amor. 


Lectura del árbol genealógico (fidelidades y bendiciones).Arcano VI El Enamorado. Según lo que yo puedo ver, hay dos dinámicas ciegas e infantiles (de criaturas desde el pensamiento mágico infantil pensamos que podemos unir a todos nuestros ancestros, curarlos, salvarlos, hacerlos felices, aliviarles sus cargas, etc. y por buscar sentido de pertenencia en nuestro clan y también por sentido de supervivencia, nos entrometemos en los destinos de los mayores): Una en la que te sitúas en el lugar de tu abuelo materno y en algunas etapas de tu infancia haces el rol de papá de tu mama. Queriendo inconscientemente, y por amor ciego, contentar y gustar a tu mama, cuidarla, o dicho de otra forma liberarla de sus heridas infantiles. Por otro lado, significa que si ocupas el sitio de tu abuelo materno le estás diciendo a este inconscientemente: "Yo en tu lugar". Y por lo tanto, te pones por encima de él. ¿Y porque ocupas su lugar? Porque hasta cierto punto es un excluido (alguien que ha sido juzgado o se ha sentido juzgado por la familia o alguien de la familia). Aquí la frase sanadora es la siguiente: "Querido abuelo, respeto tu sitio. Tu eres el papá perfecto para mí mamá. Y yo solo soy tu nieto y únicamente tu nieto". La otra dinámica infantil que se ve, es que en alguna etapa de tu infancia también te colocas como "pareja de mamá", porque en el fondo sientes que tu papa no está disponible como amante para tu mama y ahí ocupas su sitio y le dices también inconscientemente "yo en tu lugar". Y por lo tanto, te pones por encima de él. Aquí la frase sanadora hacia tu mama es la siguiente: "Mamá, el que es bueno, perfecto e ideal para ti es papa y no yo. Yo solo soy tu hijo y únicamente tu hijo". Aquí la frase sanadora hacia tu papa es la siguiente: "Papa, respeto tu sitio. A tu lado me hago hombre, a tu lado me hago adulto, a tu lado tomo la masculinidad". Estas dinámicas de niño (que son como un rito de iniciación y de formación por parte de tu genealogía), te llevan más tarde de adulto, a seguir un patrón dentro de tus relaciones íntimas, afectivas o de pareja: Por un lado, colocándote de papa de tus parejas (de manera que no te colocas de igual a igual, atrayendo a parejas a las que cuidar y por las cuales no te sientes cuidado o correspondido al mismo nivel). Por el otro, tal vez no estando disponible emocional y sexualmente para tus parejas, ya que estás energéticamente emparejado con tu mama (atrayendo a parejas que tampoco estén disponibles y con las cuales te resulte difícil establecerte al mismo nivel). Eso significa, que hasta cierto punto, excluyes tu parte de amante, quitando peso a tu propio goce, disfrute y experiencia como hombre adulto sexual. Para que una pareja se pueda considerar pareja completa (energéticamente), debe unirse primero desde la sexualidad, añadiendo luego la afectividad, la comunicación y la convivencia. Pero si tiene más peso la afectividad que la sexualidad, entonces el vínculo se torna padre-hijo, en lugar de amante-amante. Aquí la frase sanadora hacia la pareja es la siguiente: “Yo y tu somos igual de adultos emocionalmente. Yo soy tu amante y únicamente tu amante. (Ni tu hermano, ni tu madre o padre, ni tu psicólogo). Tu eres mi amante y únicamente mi amante. (Ni mi hermano, ni mi madre o padre, ni mi psicólogo). Yo te doy lo suficiente de mí (lo que tengo). Tú me das lo suficiente de ti (lo que tienes). Y así, ambos quedamos libres”. Tu árbol genealógico te forma y te transmite unas creencias desde las cuales te dice internamente: "Hay que ayudar a los demás. Los demás nos tienen que ver con buenos ojos. Tenemos que dar buena impresión y contentar, complacer y gustar al otro". De manera que tu genealogía te sitúa mirando hacia fuera, priorizando lo de fuera, y quitando atención e importancia a la individualidad (que quiero yo, quién soy yo, que necesito yo). Por lo tanto, tu tarea aquí es, equilibrar tu atención hacia los demás con la atención que te das a ti mismo. Para poder estar disponible con los demás, antes debo estar disponible para mi mismo. Para sentir a los demás, primero debo sentirme yo mismo. Para escuchar a los demás, primero debo escucharme yo mismo, etc. Aquí la frase sanadora hacia tu sistema familiar de origen es la siguiente: "Respeto vuestra forma de uniros. Yo con amor, lo haré a mi manera. Por favor, miradme bien si yo lo hago diferente". 

 Ejercicio sanador 3. Ocupar el lugar de nieto con el abuelo materno y ocupar el lugar de hijo con la madre. Coges una foto de tu abuelo materno (una copia), y detrás de la foto escribes la siguiente frase sanadora: "Querido abuelo, respeto tu sitio. Tu eres el papá perfecto para mí mamá. Y yo solo soy tu nieto y únicamente tu nieto". Colocas la foto dentro de un marco dorado. Por unos días, cuelgas la foto en algún lugar visible de tu casa y mirando hacia la imagen de tu abuelo repites la frase anterior. Pasados estos días, la envuelves bonita tipo regalo, y junto con una caja de bombones se la regalas a tu mama. Le dices la siguiente frase sanadora: "Mama, el es el padre perfecto para ti, yo solo soy tu hijo, y únicamente tu hijo". 

 Ejercicio sanador 4. Respetar el sitio del padre como pareja de mamá y ocupar el lugar de hijo con la madre. Coges una foto en la que salgan tus padres juntos (una copia), y detrás de la foto escribes las siguientes frases sanadoras: "Mamá, el que es bueno, perfecto e ideal para ti es papa y no yo. Yo solo soy tu hijo y únicamente tu hijo". "Papa, respeto tu sitio. A tu lado me hago hombre, a tu lado me hago adulto, a tu lado tomo la masculinidad". Luego le pones un marco bonito, lo envuelves tipo regalo y junto con unos dulces, se lo regalas a tu madre. Le dices la siguiente frase sanadora: "Ahora quedo libre y disponible emocionalmente y sexualmente para vivir el amor de pareja".

 Ejercicio sanador 5. Liberarte de una creencia genealógica limitante y sustituirla por una frase de poder. Te compras dos camisetas blancas. En una escribes con un rotulador permanente la creencia limitante: "Hay que ayudar a los demás. Los demás nos tienen que ver con buenos ojos. Tenemos que dar buena impresión y contentar, complacer y gustar al otro". Coges una pala para cavar un agujero en la tierra, un puñado de dulces, las dos camisetas, el rotulador, una plantita y un poco de miel o de sirope suficientemente líquido. Te pones encima la camiseta con la creencia limitante, el resto lo pones todo en una mochilita, y te vas a hacer una excursión. Cuando llegues a la meta, te quitas la camiseta, haces un  agujero en la tierra, la extiendes, añades los dulces, y antes de taparlo con tierra, miras una última vez la frase limitante de la camiseta y dices la siguiente frase sanadora: "Queridos ancestros, por mucho tiempo adopte vuestro pensamiento y a partir de ahora, con amor os desobedeceré". Tapas con tierra, y plantas encima la plantita, alrededor haces un círculo con miel o sirope suficientemente líquido a modo cierre, y te das la vuelta sin mirar atrás. Coges la otra camiseta blanca, y escribes una frase de empoderamiento (la que sientas), por ejemplo: "Para poder estar disponible con los demás, antes debo estar disponible para mí mismo. Para sentir a los demás, primero debo sentirme yo mismo. Para escuchar a los demás, primero debo escucharme yo mismo". Te colocas esta camiseta con la frase de poder y regresas a casa con un nuevo mensaje que irás interiorizando. Luego cuelgas esta camiseta con la frase de poder en algún lugar visible de tu casa donde te puedas recordar a ti mismo este nuevo pensamiento, más acorde con tu esencia. 

Lectura de los movimientos del alma (soluciones, contratos y servicio colectivo). Arcano XIIII La Templanza. Según lo que yo puedo ver, tu alma te invita a hacer una reverencia a tu destino genealógico, y en especial a la generación de tus abuelas y abuelos (tías abuelas, tíos abuelos e incluso parejas anteriores de tus abuelas y abuelos). Las parejas anteriores de los abuelos/as son importantes teniendo en cuenta que hicieron sitio para la llegada y entrada de tus abuelos/as, y por lo tanto, gracias a estas parejas anteriores, tú estás aquí. Aquí la frase sanadora hacia las parejas anteriores de tus abuelos/as es la siguiente: "Os veo y también formáis parte. Gracias por hacer sitio". Por otro lado, tu alma te invita a mirar de frente desde que lugar te has movido en tus relaciones y como te has "contratado" o "pactado" inconscientemente con aquellas personas que han formado parte de tu destino individual hasta este momento. Te invita a mirar de frente, desde que "personaje" te has "enredado" buscando pertenencia y supervivencia dentro de la sociedad. Te invita a mirar de frente tu "yo salvador". Aquel que salva, se siente bueno, se siente especial o incluso superior, pero en el fondo termina siendo agresor, porque rescatar emocionalmente a los demás, o llevar las cargas por los demás, en realidad es quitarle fuerza y sabiduría a los demás. Más tarde terminas sintiéndote agredido (abusado) porque te llevaste contigo los problemas que el otro no quiso solucionar o no estaba preparado para enfrentar. Cada quién lleva aquellas cargas perfectas que le permitirán a su debido tiempo (el tiempo interno de cada quién es particular) su mayor evolución. Tu tarea aquí es respetar el destino del otro y ponerte al lado, y solo al lado del otro. Ni detrás haciendo de papa, ni delante haciendo de guía. Evidentemente, si en la infancia nos dio pertenencia cuidar de los padres, o tratar de unir a los ancestros, más tarde, seguiremos interpretando este papel dentro de la sociedad buscando también pertenecer a la misma. Sin embargo salvar tiene un precio elevado, y es que, consumes gran parte de tu energía vital cuando pones tu atención en los "problemas" de los demás o bien en los "destinos difíciles" de los demás. Quién se coloca de salvador atrae a aquellos con necesidad de ser salvados pero que no se hacen cargo de sí mismos ni de su destino. Quién se coloca de salvador atrae a los agredidos (imanes de problemas) y también a los agresores (generadores de problemas). Por lo tanto, la primera maestría que te pide el alma, es mirar de frente a tu parte salvadora, y como has tratado de salvar a terceros cuando en el fondo lo que te estabas pidiendo a ti mismo era auto-rescatarte, es decir amarte y aprobarte tu mismo en lugar de pedir (inconscientemente) que te aprobaran o aceptaran los demás. La segunda maestría es asumir tu parte salvadora con todas sus consecuencias. Para ponerte en paz con tu destino tal y como ha sido hasta este momento, es imprescindible hacerte cargo de tu parte y solo de tu parte, dejando en manos de los demás que asuman o tal vez no asuman su parte, pues eso ya no es asunto tuyo. Aquí la frase sanadora es la siguiente: "Si. Asumo mi parte salvadora. Y me pido perdón por las veces que he sido, soy y tal vez seré salvador con mi corazón. Este es mi destino. Esta es mi existencia". La tercera maestría del alma es tomar distancia (desapego) con el personaje que te ha dado identidad, pertenencia y te ha ayudado a sobrevivir emocionalmente. Es decir, restar minutos de estar jugando inconscientemente a ser salvador, y en el caso de que este "rol" esté de vuelta (por circunstancias), te des cuenta lo antes posible, y por lo menos pases de jugar inconscientemente a jugar conscientemente, sabiendo que no se trata tanto de "salir del juego" (mientras vivamos formamos parte de la sociedad y esta nos tienta una y otra vez a entrar en el juego) sino de revisarte, asumir y perdonarte momento a momento por colocarte como agresor, agredido o salvador con tu cuerpo, con tu sexo, con tu corazón o con tu intelecto. Por otro lado, tu alma te está colocando en aquellos espacios, lugares, relaciones y eventos donde te está pidiendo un servicio colectivo. Si colaboras con este servicio que te pide el alma, en lugar de oponerte a ella, te vas impregnando progresivamente de una paz que no tiene fondo, que es la paz que hay en el alma, claro síntoma de que te estás entregando a su cometido momento a momento. El servicio que te pide es: "Mediar sin salvar". Dando el servicio de ayudar a otros a darse cuenta de que pueden rescatarse a sí mismos. Y al mismo tiempo permitiéndote que los demás también te recuerden a ti que en tus manos está darte las soluciones que te pides. Por lo tanto, el alma te puede ubicar en lugares donde hay disputas, poca comunicación o difícil "negociación", para que lleves a esos lugares el servicio de mediar, unir, conectar, calmar e instaurar paz. La línea entre mediar y salvar es muy estrecha y ahí está la maestría, en revisarte y desarrollar el arte de servir sin invadir.

 Ejercicio sanador 6. Incluir a las parejas anteriores de los abuelos/as que hicieron sitio. Aquí trabajarás con una visualización. Haces un centramiento con respiraciones profundas. Te relajas. Y te preparas internamente para llamar a las almas de aquellas parejas anteriores de tus abuelos/as. Esperas pacientemente a que acudan a tu llamado, te imaginas que se presentan delante de ti con su presencia, energía o siluetas. Y mirándolos de frente les dices la siguiente frase sanadora: "Os veo y también formáis parte. Gracias por hacer sitio". Ahí, sientes y observas que cambia dentro de ti. Luego te imaginas como se retiran y vuelves a ti, a tu respiración, a tu cuerpo y abres los ojos. 

 Ejercicio sanador 7. Ponerte en paz con las parejas anteriores asumiendo tu parte salvadora. Escribes una carta a cada una de tus parejas anteriores (no importa si fueron de más o menos duración, amores platónicos o solo amantes sexuales). Escribes el nombre de a quién va dirigida. La carta tiene que tener 3 bloques. Uno en donde reconoces lo dado y lo tomado dentro de la relación. Otro donde asumes desde que lugar te has movido (salvador), y un último donde reconoces y agradeces el paso de esa pareja por tu vida. Cuando tengas las cartas escritas, las recoges, y junto con un puñado de dulces, cerillas, una plantita, una pala para cavar un agujero, un poco de miel o sirope suficientemente líquido, te vas al bosque. En un lugar donde no haya peligro de incendio (zona de tierra), cavas un agujero profundo, pones las cartas, las quemas, añades ahí los dulces y tapas con tierra, plantas encima la plantita y alrededor de la misma, haces un círculo con miel o sirope a modo cierre y te vas del lugar sin mirar atrás. 

Lectura de los movimientos del espíritu (entrar en un sí a todo y a todos, agarrar  bien el don y dar bien el don al servicio del planeta). Arcano XVI La Casa Dios. Según lo que yo puedo ver, el espíritu te invita a entrar en un sí a tu propio trauma original infantil. ¿Cuál es el trauma universal en toda criatura, independientemente de su etnia, origen, familia, cultura, sociedad o religión? El trauma de no ser visto o el trauma de ser sobre-exigido. Si siento que no soy visto, siento que no existo. Si no existo, debo llamar la atención de una forma u otra para que me vean bien. Si siento que esperan demasiado de mí, siento culpa por no estar a la altura. Si no estoy a la altura, debo llamar la atención de una forma u otra para que no me miren tanto. Tal vez con drama extremo, tal vez con una felicidad extrema, tal vez ocultándome, tal vez exhibiéndome. Necesito tanto ser visto o pasar desapercibido, que me olvido de ver a quién tengo delante. Me vuelvo pues, desde este trauma no resuelto, acogido y perdonado, un excluidor del otro o un excluidor de mí mismo. Los padres no tienen aureola, no son santos ni tampoco diablos, son humanos, y no pueden estar disponibles o ausentes las 24 horas del día para sus criaturas. En algún momento te sientes ignorado o presionado, y es ahí donde se queda "fijada" tu psique infantil. Esa queja la trasladas más tarde al mundo y esperas que algún día este te libere. En tu caso más bien se puede ver el trauma de ser o sentirte sobre-exigido, es decir en parte presionado a cuidar de más, a preocuparte de más y a salvar de más a tu entorno familiar. Dicho de otra forma, "si salvo me aceptan", "sino salvo, me rechazan". Por lo tanto, tu psique infantil entiende que amar es salvar, y que para ser amado hay que ser un santo para el otro. Por eso, parte de tu desafío aquí es aprender a sostener el desencuentro, es decir encajar que no puedes contentar o agradar a todo el mundo, renunciando a mantener relaciones que no te den bienestar, alegría o placer. Dentro de una relación, también debes incluirte a ti mismo, es decir, también tienes que mirar por ti mismo. Si estar bien con el otro supone dejar de estar bien contigo mismo, entonces no es una relación de dos, es la desintegración de uno. Tu tarea es perdonarte, por las veces que has reproducido inconscientemente tu trauma original infantil. No esperes perdonar a nadie, eso es arrogante. No esperes que nadie te perdone, eso es humillante. Tal vez puedas perdonarte a ti mismo. La frase sanadora aquí es la siguiente: "Me pido perdón por las veces que he desaparecido yo, por ocuparme de más del otro". Por otro lado, el espíritu también te invita a incluir a los abortos que fueron excluidos, olvidados, ignorados o rechazados de la generación de tus abuelas/os. Cuando hay abortos (voluntarios o espontáneos) que no son vistos, o bien olvidados, o estos se vuelven un tema tabú en la familia, más tarde un descendiente se quedará mirando inconscientemente hacia ellos (es decir se quedará mirando hacia la muerte, cuidando, tratando de salvar o pretendiendo sustituirlos) con la consiguiente dificultad o resistencia a quedarse en la vida, tomar enteramente la vida, aprovechar completamente la vida. Aquí la frase sanadora es la siguiente: "Os veo. También pertenecéis. Respeto vuestros destinos. Y os llevo en mi corazón". Por último te hablaré de tu don. Antes, te diré cual es la misión de vida, que de hecho es la misma para todo el mundo. La misión de vida se trata de dos grandes movimientos internos: Agarrar bien el don (se puede agarrar mal) y dar bien el don (se puede dar mal). El don nos es prestado por "algo más grande". Aquí lo llamamos Espíritu. Nos es prestado desde que somos un embrión. No nos cae del cielo y ya. Sino que tenemos que agarrarlo, comprometernos con él, hacerlo nuestro. Por lo tanto, por un lado está la necesidad de recordarnos cuál es nuestro don y por otro lado, la necesidad de abrir la mirada a qué me lleva a lograr agarrar bien mi don y que me lleva a lograr dar bien mi don. En este momento evolutivo de tu vida, es apropiado revisarte en cómo y desde que lugar (actitud de servicio o actitud narcisista) estás dando tu don. Una persona que agarra bien el don siente la fuerza interior y la autoridad interior necesarias para dejar de llamar a los abusadores, explotadores y dictadores o bien deja de ser un abusador, un explotador o un dictador de sí mismo o de otros. Una persona que agarra bien el don, atrae a colaboradores (personas que a su vez también hayan agarrado bien su don) y une su don al don del otro creando un don más grande al servicio del planeta. Una persona que da bien el don, se siente interiormente dichoso y abundante, deja de llamar a la ruina, el vacío y el estancamiento. Para dar bien el don, primero te toca reverenciar el destino de tu mamá y de las mujeres de tu linaje femenino, en especial honrar el precio entero que pagaron (anímico, físico, mental, emocional, sexual y energético) por ser las portadoras de la vida. Una vez lo haces y te revisas en ello, estás dando bien tu don y te sientes abundante. Es incompatible dar el don y no sentirte abundante. Si es así, algo chirría, algo va mal. Aquí la frase sanadora hacia tu mama y mujeres de tu genealogía es la siguiente: "Queridas mías. Os tomo enteras. Gracias por ser vehículos de vida. Sois las perfectas para mí. En vuestro honor, yo haré lo mejor posible con mi vida". Añadir, que el don está en todo lo que hacemos y decimos, no solo en relación a la profesión. El don es el toque mágico que le damos a todo, es como brillamos, agarrando el don sujetamos el cielo, dando el don embellecemos la tierra. No es tan importante la herramienta que utilizamos, sino el don con el que usamos la herramienta. El don es para todos. Incluye a los demás y me incluye a mí mismo. Según lo que yo puedo ver, TU DON ES TRANSMITIR ALEGRÍA. En especial, transmitir alegría para aquellas personas que viven tragedias, dramas, impactos, traumas y sacudidas en la vida. Tu alegría es un amortiguador y un bálsamo para el dolor. Solo con tu presencia transmites alegría. Una alegría que invita a celebrar la vida, la existencia. Un canto a la alegría solo por el hecho, por el gran hecho de existir. Dicho de otra forma, eres el "alma de la fiesta". En la generación de tus abuelos/as hay excluidos y excluidores. En tu corazón tú estás con unos y con otros, y quieres unirlos, hacerlos dialogar dentro de ti. El espíritu te dice, míralos a todos, y diles: "Todos pertenecéis por igual. En mi corazón sois igual de importantes y amados y os tomo de igual forma, sin importarme lo que hayáis hecho. Os respeto".  

 Ejercicio sanador 8. Hacer un sitio a los abortos de la generación de los abuelos/as. Coges fotos (copias) de tus 4 abuelos. Y varios muñequitos de madera que representaran aquí a los abortos. Déjate sentir si son uno, dos, tres o más. Harás una tumba. Te llevas también un puñado de dulces, una pala para cavar, una plantita, y un poco de miel o de sirope suficientemente líquido. Te vas a hacer una excursión. Cuando llegues a la meta, cavas un agujero en el suelo, pones los muñequitos de madera estirados, junto con las fotos de tus abuelos/as. Y mirando hacia los muñecos dices la siguiente frase sanadora: "Os veo. También pertenecéis. Respeto vuestros destinos. Y os llevo en mi corazón". Ahí luego tapas con tierra, plantas la plantita, alrededor haces un círculo con miel o sirope a modo cierre y te vas de lugar sin mirar atrás. 

 Ejercicio sanador 9. Reverenciar el destino del linaje femenino para dar bien el don al planeta. Coges una cartulina grande. Harás un mural con las mujeres de tu genealogía. Desde las bisabuelas, abuelas, tías y mama. Asignarás a cada una, un arquetipo femenino que te conecte con la abundancia. Buscarás en Google, imágenes de arquetipos femeninos relacionados con la fertilidad, la prosperidad, la plenitud. Colocas en la parte superior de la cartulina, a tus bisabuelas. A la izquierda a tus dos bisabuelas maternas (la mama de tu abuela materna y la mama de tu abuelo materno), con las imágenes que hayas sentido asignarles y debajo de las imágenes su nombre completo. A la derecha a tus dos bisabuelas paternas (mama de tu abuela paterna y mama de tu abuelo paterno), igual que te mencioné anteriormente. Debajo de estas, a la izquierda colocas a tu abuela materna y a la derecha a tu abuela paterna. Debajo de tus abuelas colocas a tu mama, a su izquierda sus hermanas y a su derecha puedes colocar a las tías paternas. Debajo, el último, te pones tu con una foto actual. Cada una de ellas tendrá asignado su arquetipo femenino y debajo su nombre completo. Colocaras el collage en algún lugar visible de tu casa, y por un tiempo (el que necesites hasta que sientas que la imagen aterrizó en tu corazón), te pones delante del mural y una a una (empezando por tus bisabuelas y por orden jerárquico) le dices la siguiente frase sanadora: "Querida mía. Te tomo entera. Gracias por ser un vehículo de vida. Eres la perfecta para mí. En tu honor, yo haré lo mejor posible con mi vida". Una vez sientas que lo integraste, puedes dejar el mural colgado, cambiarlo de sitio o guardarlo. 

 Ejercicio de cierre: Te propongo una vez hayas leído detenidamente tu lectura de Tarot Caracterológico & Genealógico & Terapéutico & Evolutivo, que te imagines por un momento que has leído la secuencia de una película. ¿Cómo la titularías? 

 De esta forma, tú mismo/a das un sentido propio a tu lectura, sintetizando y personalizando el mensaje esencial de los arcanos. 

 MENSAJE DE LOS 4 ACUERDOS  
No te tomes nada personalmente. No consumas veneno emocional. Si te tomas las cosas personalmente te conviertes en una presa para los depredadores. Ellos pueden captar tu atención con una simple opinión y alimentarte con el veneno que quieren. ¡Recházalo! 

 MENSAJE DE LOS ÁNGELES
Yo soy el ángel que baja para sostenerte... Estás en un momento de tomar decisiones importantes. Calma... Aflójate... Te doy la luz para guiarte hacia lo mejor para ti: Actúa con... CORAJE Y DECISIÓN. 

 FLORES DE BACH
Según los arcanos de tu lectura las esencias florales que pueden apoyarte en tu proceso de sanación son las siguientes: MIMULUS, CENTAURY, OLIVE, STAR. 

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Actualmente facilita y dirige cursos, conferencias, talleres, sesiones individuales y psico-encuentros colectivos de Tarot Caracterológico & Genealógico & Terapéutico & Evolutivo orientado a terapeutas, formadores y buscadores.
Psicotarólogo (sistema Jodorowsky&Hellinguer). Métodos de psicoterapia aplicados al Tarot de Marsella, acelerador de la Conciencia. Enfoque Gestáltico y Sistémico-Familiar.
Naturópata, consultor del sistema Aura-Soma y luzpuntura, Reiki Usui Tibetano, Registros Akashicos, terapeuta Gestalt, Constelador Familiar.







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